Desde los pueblos originarios, la tradición de India, los Lamas, Egipcios, y un sin fin de civilizaciones que fueron utilizando esta técnica de forma diferente.
En oriente meditaban con ellos para encontrar un espacio de silencio, concentración y meditación, y muchas veces conexión con reinos superiores.
El Psicólogo, Psicoanalista Carl Jung fue un pionero en la utilización de Mandalas con fines terapéuticos.
Por un lado la interpretación de los mismos y por otro la ayuda a descargar cosas del inconsciente que nos perturban y que se canalizan en trazos, colores, dejando plasmados en los mismos traumas, que de esa forma podemos canalizar y ayudar a las personas a recobrar su armonía.
Si bien es muy interesante comprar un libro y pintarlo, mucho mas lo es cuando alguien guía el trabajo. lo analiza y hace una devolución del mismo a la persona y al mismo tiempo le enseña como contrarrestar por medio de otro Mandalas, o el mismo pintado con ciertos colores, resultando esto sanador para la persona.
Como profesora, docente los invito a entrar en este maravilloso mundo creativo, pero siempre de la mano de una persona capacitada, para poder ayudar a entenderse y completarse en una tarea que aunque sencilla aporta múltiples beneficios a quien lo practica.
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