domingo, 20 de septiembre de 2009

EL YOGA COMO DISCIPLINA


Muchas veces escuchamos decir voy a hacer gimnasia Yoga, y sería importante que se tomara consciencia que lo que vamos a hacer es una disciplina.
Si bien vamos a notar que las dolencias o molestias desaparecen o se minimizan, eso es solo una parte del aprendizaje de esta Filosofía de vida.
En primer lugar hago incapié en no confundir Filosofía o disciplina con Religión, porque el Yoga en sí no es una práctica religiosa sino espiritual, que no es lo mismo.
Ya que quién lo practica puede ser Agnostico, al hablar de espiritual tenemos en cuenta la energía y la manifestación más interna de cada ser, el motor invisible que nos impulsa a seguir adelante.
Al practicar un Yoga terapeutico, como el que realizamos en Namasté, tratamos de abordar los diferentes componentes del ser.
Volvemos a utilizar la respiración recuperando la capacidad pulmonar perdida, aprendemos a concentrar la mente y a llevarla hacia el pensamientos que nosotros deseamos.
Tomamos consciencia de las tensiones y contracturas, aprendiendo las distintas tecnicas y posturas para relajarnos y recuperar la elasticidad, sin dolores.
Podemos en la hora que dura la clase, ocuparnos positivamente de nosotros, dejando de lado los problemas cotidianos, y retroalimentandonos para poder seguir adelante.
Descubrimos posibilidades en nuestro cuerpo que estaban dormidas, y la mente se vuelve mucho mas atenta pudiendo no enredarnos tanto cuando tenemos un problema, y tener mejor capacidad de resolución del mismo.
Por eso hablamos de disciplina, no es simplemente un entretenimiento para evadirnos un rato y no pensar sino una serie de elementos, para ir logrando en la vida diaria una mayor capacidad de disfrutar todo lo bueno que en general no tenemos en cuenta y aprender a agradecer por todo el bien que recibimos y los buenos momentos que podemos compartir con nuestros seres queridos.

lunes, 14 de septiembre de 2009

LA IMPORTANCIA DE LA PRACTICA PERSONAL


Todas las disciplinas tienen algo en común, algunas son de más fácil aprendizaje, como el Reiki que no es necesario estudiar, y esforzarse para concentrarse.

Otras tienen incontables posibilidades de interpretación y conocimiento como la Metafísica y el autoconocimiento.

En el Yoga encontramos diferentes formas de abarcar una misma meta la Unión.

En Astrología siempre hay algo por descubrir.

En cualquier terapia energética, encontramos caminos, rumbos formas diferentes.

Y así con la amplia gama de disciplinas y Filosofías, pero hay un punto fundamental que debería ser común en todas ellas para convertirnos en un buen Terapeuta.

La practica personal, el desarrollo interno de aquello que se va a transformar en una herramienta de trabajo, de superación personal y de ayuda al paciente que nos consulta.

Es muy fácil repetir preceptos como loros, o sabernos de memoria, pero realmente VIVIMOS eso que DECIMOS.

Y en este punto es que encontramos la diferencia entre profesionales serios y dedicados verdaderamente a la ayuda integral de la persona que acude a nuestra consulta o terapia.

En estos 24 años de profesión hoy más que nunca hago incapié en sugerir una practica personal, tanto del terapeuta como del paciente o alumno.

Acuario es la Era del accionar de acuerdo a los nuevos paradigmas y vivenciarlos cotidianamente, no es una tarea fácil, pero es un desafío digno de ser vivido.

Practica, dedicación, seriedad, constancia y volverlo a intentar tantas veces como sea necesario hasta apreender e ir obteniendo sabiduría.

Vale mas una onza de práctica que una tonelada de teoría.